TÍTULO ORIGINAL: Darse Cuenta
AÑO: 1984
DURACIÓN: 106 min.
PAÍS: Argentina
DIRECCIÓN: Alejandro Doria
REPARTO: Luis Brandoni; Dora Baret; Luisina Brando; Lito Cruz; Oscar Ferrigno; María Vaner; China Zorrilla; Darío Grandinetti; Fernando Álvarez; Clotilde Borella; Mónica Villa; Manuel Callau; Juan Carlos Corazza; Norberto Díaz; Gabriela Flores.
GÉNERO: Drama. Crítica Social. Medicina. Amistad. Discapacidad.
SINOPSIS: «Darse Cuenta» es una película argentina dirigida por parte de Alejandro Doria. Esta conmovedora obra cinematográfica se centra en temas como la esperanza, la redención y la lucha contra la deshumanización en el ámbito hospitalario. Con un elenco liderado por Luis Brandoni, China Zorrilla y Darío Grandinetti, la película ofrece una profunda reflexión sobre la vida, la muerte y el valor de la compasión en el entorno médico.
La historia sigue a un joven llamado Sergio (interpretado por Darío Grandinetti) que sufre un terrible accidente automovilístico y es llevado a un hospital público en Buenos Aires. En un sistema de salud caracterizado por la burocracia y la falta de recursos, Sergio se enfrenta a un diagnóstico sombrío que lo deja al borde de la desesperanza. La negligencia y la indiferencia de algunos miembros del personal médico agravan su situación, reflejando la crisis del sistema de salud en Argentina durante ese período.
Sin embargo, en medio de este ambiente desalentador, Sergio encuentra esperanza en la figura del Dr. Agustín (interpretado por Luis Brandoni). El Dr. Agustín es un médico comprometido y compasivo que se convierte en una figura paterna para Sergio. A través de su dedicación y humanidad, el Dr. Agustín desafía las normas del hospital y se compromete a brindar la mejor atención posible a su joven paciente. Su relación con Sergio se convierte en el eje central de la película, mostrando cómo el cuidado y la empatía pueden marcar una diferencia significativa en la vida de una persona.
El Dr. Agustín también se enfrenta a sus propios desafíos personales y profesionales. La película explora sus luchas contra la burocracia del hospital y la presión de trabajar en un sistema de salud en crisis. A pesar de estos obstáculos, su dedicación y amor por la medicina lo impulsan a seguir adelante, convirtiéndolo en un símbolo de esperanza y resistencia. La actuación de Luis Brandoni aporta una profundidad y sinceridad al personaje, haciendo de Agustín un modelo de integridad y compasión.
China Zorrilla por su parte interpreta a la enfermera Matilde, una mujer fuerte y decidida que trabaja junto al Dr. Agustín. Matilde es una figura maternal que ofrece consuelo y apoyo no solo a los pacientes, sino también al personal del hospital. Su relación con Agustín es de camaradería y respeto mutuo, y juntos forman un equipo que lucha por proporcionar una atención digna y humana en un entorno adverso. La química entre Brandoni y Zorrilla añade una capa de calidez y humanidad a la película.
«Darse Cuenta» también introduce a otros personajes que enriquecen la narrativa. Entre ellos se encuentra el director del hospital, que representa los desafíos administrativos y las limitaciones del sistema de salud pública. Además, los familiares de los pacientes, otros médicos y el personal de enfermería muestran diversas perspectivas sobre la lucha diaria dentro del hospital. Estas interacciones subrayan la complejidad y las múltiples capas del sistema de salud, así como las dificultades que enfrentan tanto los pacientes como los profesionales de la salud.
La dirección de Alejandro Doria y el guion, coescrito con Jacobo Langsner, logran capturar la esencia de la vida hospitalaria con un enfoque realista y emotivo. La película utiliza una narrativa lineal pero efectiva, combinando momentos de dolor y desesperación con instantes de alegría y redención. La cinematografía, que a menudo utiliza planos cerrados para capturar la intimidad de las interacciones, contribuye a la atmósfera emocional de la película.
«Darse Cuenta» es una obra que destaca la importancia de la humanidad y la empatía en la medicina. A través de su narrativa poderosa y sus personajes bien desarrollados, la película invita a la reflexión sobre cómo un sistema de salud puede afectar a los individuos y cómo las acciones compasivas pueden tener un impacto duradero. Es un testimonio de la resiliencia del espíritu humano y de la capacidad de las personas para hacer una diferencia positiva en la vida de los demás, incluso en las circunstancias más difíciles.