
TÍTULO ORIGINAL: Los Olvidados
AÑO: 1950
DURACIÓN: 88 min.
PAÍS: México
DIRECCIÓN: Luis Buñuel
REPARTO: Estela Inda; Miguel Inclán; Alfonso Mejía; Roberto Cobo; Alma Delia Fuentes; Francisco Jambrina; Sergio Virel; Jorge Pérez Martínez; Mario Ramírez.
GÉNERO: Drama. Infancia. Pobreza. Crítica Social. Crimen. Drama Psicológico. Película de Culto.
SINOPSIS: «Los Olvidados» es una película mexicana dirigida por el aclamado cineasta español Luis Buñuel. Este drama social retrata de manera cruda y realista la vida de un grupo de niños marginados en la Ciudad de México. La película, considerada una obra maestra del cine, se centra en la pobreza, la violencia y la desesperanza que afectan a los jóvenes que crecen en los barrios más desfavorecidos de la ciudad.
La historia sigue principalmente a Pedro (interpretado por Alfonso Mejía), un adolescente que lucha por escapar del ciclo de pobreza y criminalidad que lo rodea. Pedro vive con su madre, quien muestra poco afecto por él, y se ve atrapado en un ambiente hostil donde las oportunidades para un futuro mejor son prácticamente inexistentes. La llegada de El Jaibo (Roberto Cobo), un joven delincuente recién escapado del reformatorio, complica aún más la vida de Pedro. El Jaibo, con su personalidad dominante y violenta, ejerce una influencia negativa sobre Pedro y los otros niños del barrio.
Desde el principio, Buñuel establece un tono sombrío y realista, mostrando la brutalidad de la vida en las calles. El Jaibo, resentido y vengativo, arrastra a Pedro a un mundo de delincuencia, obligándolo a participar en actos de violencia y robo. En una de las escenas más impactantes, El Jaibo asesina a Julián (Javier Amézcua), un antiguo amigo a quien culpa de haberlo delatado, y obliga a Pedro a guardar silencio sobre el crimen. Esta acción marca un punto de no retorno para Pedro, quien se encuentra cada vez más atrapado en una espiral de delincuencia.
A lo largo de la película, Buñuel no solo se enfoca en la brutalidad física, sino también en la violencia psicológica y emocional que sufren los personajes. La madre de Pedro, interpretada por Estela Inda, es una figura fría y distante, cuya incapacidad para mostrar amor y apoyo agrava la desesperación de su hijo. La película también presenta a otros niños en situaciones similares, como Ojitos (Mario Ramírez), un niño ciego que es abandonado por su padre, y Meche (Alma Delia Fuentes), una joven que se enfrenta a la amenaza constante de abuso.
El tratamiento visual de Buñuel es notable por su realismo y atención al detalle. Utiliza escenarios naturales y una fotografía en blanco y negro para capturar la dureza de la vida urbana. La cámara sigue a los personajes a través de calles sucias y casas deterioradas, creando una sensación de claustrofobia y desesperanza. A pesar de su enfoque realista, Buñuel también introduce elementos surrealistas, como secuencias de sueños, que reflejan los deseos y miedos internos de los personajes, añadiendo una dimensión psicológica a la narrativa.
«Los Olvidados» es una crítica mordaz de la indiferencia de la sociedad hacia los más vulnerables. Buñuel presenta a las instituciones, como la familia, la escuela y la justicia, como ineficaces y, a menudo, corruptas. La película sugiere que la marginación y la violencia son consecuencias directas de una sociedad que falla en proteger y cuidar a sus niños. A través de sus personajes, Buñuel muestra cómo la falta de amor, apoyo y oportunidades puede llevar a los jóvenes a un ciclo perpetuo de violencia y desesperación.
A pesar de la oscuridad de su temática, «Los Olvidados» también deja espacio para la compasión y la esperanza. A través de pequeños gestos y momentos de humanidad, Buñuel sugiere que el cambio es posible, aunque sea difícil. La relación entre Pedro y su madre, aunque tensa, muestra atisbos de una posible reconciliación, y personajes como Don Carmelo (Miguel Inclán), un anciano que intenta ayudar a Ojitos, representan la posibilidad de bondad en medio de la adversidad.